El bebé acaba de cumplir su primer año pero el viaje vital solo acaba de comenzar. Después de los doce meses el desarrollo infantil continúa con ritmo notable y se observan hitos en el área motora, social, cognitiva y del lenguaje con progresos como caminar, correr, hablar, recordar situaciones o mejoras en la socialización. En este artículo te acercamos los principales avances que debes esperar después del primer año aunque hay que recordar que cada bebé tiene su ritmo y pueden producirse pequeños adelantos o retrasos.
La evolución del desarrollo motor
Recién cumplido el primer año, el bebé comienza con una notable ampliación en su repertorio de movimientos y acciones. Observarás como su energía parece no tener fin ni tampoco su curiosidad y el deseo de explorar todo lo que le rodea. Además, cada día que pasé irá ampliando su independencia ya que poco a poco controlará mejor su movilidad y su fuerza.
Hitos del desarrollo motor:
- Creciendo lentamente: El ritmo de crecimiento del bebé se ralentiza respecto al primer año de vida. No obstante, se siguen produciendo avances y, por ejemplo, las piernas y brazos aumentan la masa muscular.
- Después de los 15 meses: ¡Cuidado con los escalones! Este es uno de los mejores consejos que se puede recibir con un bebé que alcanza los 15 meses. El niño ya camina de forma adecuada y comienza a querer subir escaleras gateando o, incluso, subiendo los escalones de uno en uno. También es común observar cómo se decanta por una mano concreta.
- A los 18 meses: En este punto comienza a correr, aunque aún de forma algo torpe, y a saltar con los dos pies. En su proceso de sumar autonomía puede llegar a quitarse la ropa solo y también se inicia la curiosidad de hojear los libros, eso sí, pasando dos o tres hojas a la vez.
- A los 2 años: A los 24 meses ya tiene más equilibrio, puede patear una pelota, consigue subir las escaleras sin ningún tipo de ayuda y la exploración de libros ya se realiza pasando las hojas de una en una.
Es importante apuntar que en la evolución motora del desarrollo infantil no será hasta los siete años cuando se consigan movimientos de locomoción complejos. Además, hasta la adolescencia no existirá una coordinación perfecta entre locomoción y equilibrio con la manipulación de las manos.
El progreso del desarrollo cognitivo
A partir del primer año de vida el bebé comenzará a hablar y hablar. Su vocabulario será limitado pero no su capacidad de entender lo que se le dice y su capacidad de ir aprendiendo nuevas palabras. De la mano de la evolución del lenguaje se producirán notables avances a la hora de socializar.
Hitos del desarrollo infantil en el área cognitiva:
- A los 15 meses: El bebé solo sabe utilizar entre tres y seis palabras. Es habitual la comunicación con gestos y sonidos y la imitación de las tareas que observa a otras personas hacer.
- A los 18 meses: El vocabulario se amplía hasta las diez o quince palabras. En este punto existe una mayor comprensión del mundo que lo rodea lo que, en muchos casos, también conlleva la aparición del temor a los extraños. Además, el bebé cumple órdenes sencillas y suele repartir besos y abrazos.
- Con 2 años: El repertorio de vocabulario oscila entre las 20 y las 50 palabras y el bebé comienza a construir frases de dos o tres palabras. En este punto es muy común que observe a otros niños y niñas pero que todavía le cueste interactuar con ellos.
Hay que señalar que, en el desarrollo del lenguaje, no se alcanzará la madurez fonético-fonológica hasta el cuarto año de vida. En cuanto a la capacidad de crear frases con una estructura gramatical correcta esto no será posible hasta el sexto año de vida.
El apego en el desarrollo infantil
¿Cuando es habitual que el bebé se relacione con otros niños?, ¿es normal su cercanía con la figura materna?, ¿en qué momento comienza a interiorizar las normas sociales? En el desarrollo infantil no dejan de producirse novedades y de la mano de cada progreso llegan nuevas preguntas para los progenitores. Por ello, en el terreno de las interacciones sociales siempre es útil estar familiarizado con la teoría del apego que desarrolló el psicólogo Piaget.
Algunos aspectos relevantes que se pueden tener en cuenta después del primer año de vida son:
- Hasta los 24 meses es habitual que se establezca una figura con la que se tiene mayor proximidad, generalmente la madre. Es una fase que comienza a los seis meses y que es la del apego propiamente dicho.
- Después del segundo año de vida se produce una mayor capacidad de adaptación. El desarrollo del lenguaje y su capacidad de percibir a la madre como una figura que persiste en el tiempo hace que se relaje su tendencia a seguirla.
- Tras los doce meses ya se observan algunas interacciones con otros niños. Sin embargo, lo habitual es que no sea hasta al menos el tercer año de vida cuando existe una preparación adecuada para jugar con otros.
- Entre los tres y los cinco años se observan las primeras cuestiones vinculadas con las normas sociales y morales.
El desarrollo infantil tras cumplir el bebé el primer año de vida continúa con avances notables. En el área motora destacan los progresos en la capacidad para moverse que le permiten ampliar su autonomía; mientras que en el área cognitiva, el desarrollo del lenguaje es el punto más relevante.